El castellano es una de las pocas lenguas que cuentan con los verbos ser y estar de manera diferenciada. No sé a qué se deba eso, sera cuestión de filología y, posteriormente, de filosofía e historia de la cultura, pero por medio de un análisis del lenguaje es a veces posible determinar el carisma de un pueblo.
Es ya clásico, y un lugar común, hablar de 'El laberinto de la soledad' de Paz y del estudio que contiene sobre la palabra 'chingada'. A pesar de mi poco original cita, ésta me sirve para ejemplificar cómo el lenguaje y el modo de hablar de un pueblo reflejan aunque sea un poco su personalidad.
Los 'ayes' del castellano, son en inglés 'ooh's'. Ejemplo: si voy caminando descalzo en mi habitación y golpeo el dedo chiquito de mi pie con la pata de mi cama, exclamo: '¡Ay, carajo!' Y sufro de un dolor inmenso. Si un estadounidense hace lo mismo, exclama: 'Oh, shit!', y padece un dolor de más o menos las mismas dimensiones que el mío.
¿Por qué, si el dolor es similar, o de la misma especie, la interjección pronunciada es diferente?
Asimismo, hay idiomas que retratan de mejor manera que otros, con sus palabras, la realidad denotada. Por ejemplo, la serie estoadounidense sesentera de Batman (aquel gordillo de vestimenta lila), denotaba los golpes con las siguientes palabras: 'pow', 'zaz', 'bam'. En cambio, el castellano denota los golpes con: 'plop', como hiciera otrora René Ríos, con su legendario Condorito. Si bien soy consciente de todo el contenido metafísico y moral que el 'plop' condoriteano implica, me parece analogable al 'pow' de los estadounidenses sesenteros, ya que éste también trae consigo toda una cosmovisión, una manera de ver el mundo.
Ser y estar, en fin, es uno de los temas más complicados para los estudiantes no-hispanos de lengua hispana.
Hace unas semanas estuve en España, y en el departamento en que vive mi novia, habita con ella una mujer polaca, estudiante de lengua y literatura hispánicas. El polaco, curiosamente, solamente tiene un verbo para referirse a 'ser' o a 'estar'. Ella fue quien me comunicó la problemática y la dificultad del castellano en este ámbito y me pidió que tratara de explicarle la diferencia.
Lo que primero me vino a la mente para hacerlo fue decirle que intentara predicar la bondad a una mujer, primero con el verbo ser y luego con el verbo estar.
Pensé que ahí encontraría claramente la diferencia.
La intención de esto es, únicamente, exaltar la candidez de sus lectores.
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12 comentarios:
Ah cabrón, felicidades por salir del closet con eso del novio.
Jiote Jiote
P.D. Tienes permiso de mentármela cuando me veas por mi simpleza.
josú! ese último comentario me pareció un tanto cuanto machista
Charp: gracias por tu comentario, hice lo debido.
Phoenix: Así es como hablamos. Es lo que hay.
¿Y la polaca? ¿Es o está?
Además, tú y yo ya habíamos tenido una discusión sobre el pedo de ser y/o estar.
Fue una de esas veces en las que yo te decía que la filosofía es basura y tú tratabas de defenderla... De ahí, no sé cómo ni por qué salió el tema de los verbos.
Pero claro, como casi todas las personas con las que he hablado de filosofía, no me tomaste en serio.
A veces pienso que nadie me toma en serio.
¿Este es un buen lugar para manifestar el vacío que siento en mi vida?
¿Vale la pena que intente decir algo al mundo aquí, en la ventana de comentarios del blog de Justo Medio, cuando sé, de antemano, que nadie me va a tomar en serio?
¿Qué me trajiste de Europa?
En el caso de la mujer ser y estar siempre marcan a diferencia; aunque a veces uno de los verbos pesa más que el otro. C'est la vie!
Mira hace días leí un post explicando la diferencia y me gusto mucho, ahi les va se los comparto:
"La onda está en saber que uno (ser) es permanente y el otro (estar) es temporal. Por ejemplo «estoy viendo la tele» significa que puedo cambiar la actividad, después puedo estar leyendo. Caso contrario con el ser, por ejemplo «soy Said» eso es algo que no cambia porque siempre seré yo (bueno, hasta que muera, pues «estoy vivo»)."
y bueno Cheve, que simpatico que eres, me hiciste reir mucho :)
Me gusta tu página justo medio,
un abrazo
Eso de las interjecciones es muy curioso.
Puedes saber si uno es latino, anglosajón o eslavo sin escucharle siquiera una sola palabra hablada. Las interjecciones latinas son más francas, las inglesas son un tanto dramáticas, y las eslavas sencillas.
¡Órale! (con sincero asombro)
Wow, wow, wow... (exagerándolo un poco)
Uja!
Ser y estar, dos joyas del idioma español.
Hello, pasando a saludar...
Todo un gusto en conocerle, en verdad, y que se repita de nuevo no?
Abrazo
Cosa buena que se haya conocido al Iván.
Salú!
Cosa buena, si si, lo creo.
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